22 septiembre 2018

Arrifana y Monte Clérigo

Mi segunda excursión ciclista fue para recorrer la primera parte de la brevet. Esa que desde João Roupeiro me lleva a Maria Vinagre, donde se coge dirección a Carrascalinho para llegar a Aljezur, que se deja atrás para coger el cruce para las playas de Arrifana y Monte Clérigo. Hago bien la subida hasta el cruce, donde tiro para la derecha en dirección a Monte Clérigo.
Cuando iba para Monte Clérigo, detrás un panel de la Rota Vicentina

Praia de Monte Clérigo

Monte Clérigo
Allí charlé con una pareja de Málaga que se alojaban en una casa rural cercana a Monchique y que afortunadamente no había sufrido daño alguno por el incendio de agosto. Estaban encantados con todo lo que veían. Les explico cual es la carretera que deben seguir para llegar a Arrifana, diciéndole que tiene tramos que son como una "torta de aceite" (risas). Por allí, me alegro de llevar las cubiertas SCHWALBE G-One Allround 700x38c.
Praia de Arrifana
Costa Vicentina, desde Arrifana

Esta zona es bastante turística y con la práctica del surf en ambas playas los visitantes han ido aumentando . Ahí por allí casas espectaculares, pero yo le tengo especial cariño a esta pequeña, de típica arquitectura rural, con esa rana en la pared, a la que he fotografiado ya varias veces.


Ruinas de una antiguo molino, cerca de la carretera para Aljezur
Estas dos salidas me ayudan para confirman las cubiertas y desarrollos que llevaré el día 6 de octubre, en mi participación en Sudoeste 200, brevet de Ranndoneurs Portugal que nos llevará del Atlántico a la cumbre de Fóia.
Por la habitualmente tranquila carretera de Carrascalinho


Reconfortarte sopa de verduras del Varzea

Esta era la bici fixie que un autocaravanista usaba para sus compras por Aljezur

Lo habitual es que colocara al final de la entrada algunos datos del recorrido (distancia, tiempo, velocidad, desnivel,etc.) pero he pensado que en una crónica de este tipo esos números no son significativos, porque lo verdaderamente importante no puede condensarse en cifras. Importan más las sensaciones, los pensamientos, las vivencias y también los olores, la brisa, la rugosidad de un firme, el vuelo o el canto de las aves, el sol o las sombras; todo ese mundo maravilloso por el que circulo a la velocidad adecuada para alcanzar un destino disfrutando de ser cicloturista.