29 mayo 2012

Anjos da Venda dos Salgueiros


Iniciamos nuestro recorrido en la aldea de Corte Gafo de Cima, situada a unos 12 km. de Mértola. Por carretera asfaltada nos dirigimos hacia Amendoeira da Serra, localidad situada más al N, con un viento en contra que nos obligó a abrigarnos. Nuestro primer destino marcado era llegar hasta Pulo do Lobo para que JO lo acabará conociendo. Poco antes de comenzar la bajada al valle del Guadiana nos detuvimos en el cartel que señala el inicio del PR 9 que va hacia el Moinho da Escalda, que decidimos conocer, no sin antes visitar Anta das Pias, un dolmen de pequeñas dimensiones situado en un cerro dominante de un extenso paisaje.


El PR nos llevó por un camino en rápida bajada hasta el valle del Guadiana. Mientras dos elementos abonaban el campo JO y yo recorrimos la estrecha senda que baja hacia el río en dirección al molino. El nombre de Moinho da Escalda tal vez sea debido a la zona rocosa que lo rodea, que absorve y concentra la energía calorífica. A pesar de estar abandonado desde 1960 todavía mantiene su estructura, capaz de resistir la fuerza de las aguas. 





El acceso hasta el molino no es fácil, tampoco seguir después el sendero marcado que continua por el monte, sobre todo sin calzado ni indumentria adecuados y además cargando con una bicicleta. De modo que tuvimos que volver sobre nuestros pasos y ascender lo que bajamos para regresar al inicio del PR y retomar la carretera, el asfalto llega ya hasta la cancela de entrada al Monte das Pias, trás la que seguimos por camino de tierra hacia el río.

De las veces que hemos visitado Pulo do Lobo esta fue, sin duda, en la que la corriente era menor. De cualquier manera este lugar, donde el río se estrecha y se precita en cascada, conserva su encanto y espectacularidad.
Dos kilómetros después el río corre por un tramo encajadado entre márgenes rocosas en un recorrido de cerca de 10 km, cuatro de los cuales, debido a su trazado rectilíneo, son conocidos como "Corredoura".





En el regreso optamos por dejar la carretera y seguir por caminos, pasando por la Herdade Monte do Vento. Poco despúes un fuerte silbido, como de olla express, sale de un pinchazo trasero en la bici de JA, que sólo quedó en el susto porque el líquido antipinchazos alojado en la cubierta acabó por sellarlo. 
Alcanzamos un cruce, a la derecha Amendoiera da Serra, a la izquierda 3 Km. a Mosteiro. Optamos por ir a este último y la carretera  es tan estrecha que tiene la particularidad de prohibir el tráfico en las horas que circula el autobus. Dejamos atrás el poblado por el camino que pasa junto a la Escola Primaria y comenzamos un largo tramo hacia el Sur en el que disfrutamos del esplendido colorido del ondulado paisaje típicamente alentejano.



Llegados a un un solitario caserío llamado Venda dos Salgueiros (Venta de los Sauces), observamos una casa de "taipa à vista", técnica de construcción típica de la zona que se adapta a las condiciones climáticas más rigurosas, y como andábamos un poco perdidos preguntamos a una mujer por el camino para Corte Gafo da Cima y amablemente nos lo indicó. Yo creo que los ángeles (anjos) de la guarda de los llamados guerreros del fin de semana no descansan los domingos y que, una vez más, estaban en el lugar y momento justos, ahora encarnados en señora alentejana,  para salvarnos de horas de calor y de  kilómetros de la basura.

Llegamos a Corte do Gafo da Cima a las dos de la tarde, con 3 h. de bici y casi 47 Km. recorridos. 

Después disfrutamos del banho do lavadouro, uno de los momentazos del día y de las cervezas frías del cafe "Correia", antes de montar en el coche para dirigirnos a la aldea de Corvos, para una reifeçao típica en el popular restaurante "A Paragem".