El sábado 29 de abril fue el día elegido para hacer la primera brevet de 200 km, con la intención de lograr ese kilometraje y poner en práctica la idea de ser randonneur (cicloturista de larga distancia, autónomo y no competitivo), para lo que habíamos trazado un recorrido gravel, aunque por asfalto en su mayor parte. Después de un viernes de intensas lluvias, la mañana se presentó nubosa y con buena temperatura y así se desarrolló el resto del día, con nube y claros (temperatura media de 18 grados) que permitía llevar maillot corto o largo.
|
El inductor del evento atravesando el Odiel por el puente-sifón |
|
El trío antes de la salida
|
|
Aljaraque |
- Tramo 1. Aljaraque-Villanueva de los Castillejos. Rodamos a buen ritmo, sobre todo por la carretera de servicio del Canal y después por la del Embalse del Piedras. Pero ese ritmo bajó cuando pasamos la parte del camino a Villanueva de los Castillejos que tiene mucha piedra, por donde era casi imposible encontrar una línea para rodar cómodo y rápido.
|
Camino a Villanueva de los Castillejos |
|
Camino de Alosno |
|
Alosno (con poco más de 62 km) |
-Tramo 2. Villanueva de los Castillejos - Alosno - San Bartolomé de la Torre. Desayuno en el Bar Andalucía. Después atravesamos El Almedro y salimos a la A-499 en busca del camino hacia Alosno, que en su mayor parte cuenta con un aceptable asfaltado, aunque en otras está bacheado y es de tierra. Saliendo de Alosno tenemos que preguntar para que nos indiquen cual es el camino hacia El Cobujón, por donde tenemos que seguir hasta llegar a la antigua vía férrea de Tharsis. Buen piso de grava y buen ritmo hasta la Rivera de Agustín. Al poco conectamos con el trazado de la Huelva Extrema. Entonces comienza la parte mas betetera de todo nuestro recorrido, sobre todo cuando dejamos atrás el Cortijo de Los Millares, lo que para nuestras bicicletas no era lo mejor, pero teníamos que seguir adelante y en aquellas alturas del día aparecieron las primeras crisis. Para entonces el viento ya comenzaba a dejarse notar y el cuerpo tenía síntomas de cansancio, especialmente en cuello, hombros y brazos. Cuando finalmente acabamos la subida de la depuradora y llegamos a San Bartolomé de la Torre hicimos una parada, compramos bebidas y plátanos y durante el corto descanso en el Bar El Palomo bebimos y comimos unos montaditos. Allí Antonio comienza su especial campaña animadora ¡llevamos más de 83 km! ¿y acaso los notáis en las piernas?
|
Parada en San Bartolomé de la Torre
|
|
Rivera de Agustín |
|
Un hito kilométrico recién plantado |
Entrada del Cortijo Los Millares
- Tramo 3. San Bartolomé de la Torre-Gibraleón- Trigueros-Niebla. Carretera favorable, en descenso hacia el Odiel, antes de alcanzar Gibraleón, a una media superior a 25 km/h, y después más carretera hacia Trigueros. A partir de aquí por el Camino del Dolmen de Soto, con viento de SW soplando con fuerza, en dirección Este hacia Niebla. Tramo largo con variedad de pisos (distintos asfaltos, grava, tierra) hasta la histórica ciudad condal, donde en Casa Ramos hacemos una de las paradas más largas del día, para bocatas y bebidas, antes de cambiar de rumbo y dirigirnos hacia el Sur. En el salón del bar los parroquianos pasan la tarde viendo y comentando un partido de fútbol de la televisión.
|
Camino del Dolmen de Soto
- Tramo 4. Niebla - Mazagón. En esta parte de nuestra aventura el aire soplaba en contra, primero en la subida por carretera hacia Bonares. Por allí fue donde creo que erramos al elegir el camino, porque debíamos continuar por el Camino del Alamillo y luego conectar con la carretera de Las Peñuelas, pero transitamos por la Vereda Las Playeras y del Villar, que está bastante bien de piso durante sus primeros km, hasta el Arboreto del Villar, pero que después va empeorando paulatinamente, sobre todo tras dejar atrás la comunidad terapéutica de FADA en Almonte, cuando se llega a un cruce y hacia Mazagón se convierte en camino, bacheado y rizado, además de embarrado, con el agravante de que el viento seguía azotando de cara. Para cuando vuelve el asfalto, aunque las piernas todavía responden, las molestias en la parte superior del tronco y en las posaderas son fastidiosas, pero nos anima el café y la tarta que nos esperan en el Puerto Deportivo de Mazagón.
|
|
Arroyo de Rocinela a rebosar, ene el Parque Natural Doñana |
|
Puerto Deportivo de Mazagón
- Tramo 5. Mazagón - Huelva - Aljaraque.
Para completar el doble centenar de kilómetros nos quedaba cerrar el círculo y dejamos Mazagón por la carretera del Muelle del Vigía, después nos adentramos en las carreteras de las instalaciones del Muelle Sur del Puerto de Huelva, cruzamos el río Tinto por el puente, que incomprensiblemente aún no cuenta con un carril seguro para los ciclistas, y en la Punta del Sebo (Monumento a Colón) enganchamos con el carril multimodal que discurre entre el Odiel y la Avda. Francisco Montenegro y llega hasta Huelva por el estadio Nuevo Colombino y cuya continuación es el Paseo de la Ría. Para ver los 200 en el gps aún nos quedaba atravesar el puente-sifón de Santa Eulalia ¡tela la que nos dio allí el fuerte viento de poniente! y seguir por el carril bici hacia Punta Umbría hasta coger el cruce para Aljaraque.
|
|
Paseo de la Ría y estadio Nuevo Colombino |
|
Paseo de la Ría y el antiguo cargadero de mineral (Muelle del Tinto) al fondo |
|
Dos copas de cervezas (morena y tostada) para un brindis final |
Respecto a bicicletas y ciclistas:
Antonio con su Felt CX en su salsa, casi estrenando cubierta delantera Schwalbe One Goes Gravel 700x38C de la que deberá dar opinión y en general satisfecho con su desempeño.
JA, que está demostrando que se puede hacer gravel con una BTT con cuadro y horquilla de acero, pedalier Shimano Alivio, cambios GripShift de 8v y ruedas de 26". Sin embargo acusó el cansancio en cuello y cervicales, amen de en gluteos, quizás porque las cubiertas Schwalbe CX Pro de 26x1.35 que monta sean flacas e incomodas (con demasiada presión) para recorridos tan largos y seguramente serían mejor, por ejemplo, unas Schwalbe Marathon Plus de 1.50, con las que añadir comodidad y capacidad de rodadura.
En cuanto a la Croix de Fer, que puedo añadir, una gozada montar en ella. Además para esta ocasión parece que llevaba la presión justa en las ruedas.
Este evento debería estar publicado en otro blog: Gravel Café. Pero como todavía es un bebé y está empezando a andar, lo hacemos en el de su hermano mayor.
La ruta en Garmin Connect y el video de Relive